Hoy día son muchas las razones por las cuales miles de personas estaremos celebrando las navidades lejos de nuestros seres queridos: trabajo, política, situación económica, familiares, inmigración, papeles, expatriación. Cualquiera que sea la circumstancia, la fiestas navideñas crean un sentimiento de nostalgia que se puede sentir más agudo durante ésta época.
Recuerdo las primeras navidades que pasé lejos de mi familia. Tenía 26 años, estaba en Ohio con mi prometido y aunque su familia siempre me hizo sentir cómo uno de ellos desde un principio, estrañaba ese calorcito que se siente cuando estás con tus seres queridos.
Mi amiga Frances Evans, fundadora del sitio web Discovering The World Through my Sons Eyes, que vive en el Sur de Carolina hace 14 años está de acuerdo.
“Si me acuerdo de las primeras navidades en Carolina del Sur. Ufff, estaba muy triste. Extrañaba el calor de la familia, las reuniones, el jolgorio y el vacilón. Acá todo es tan tranquilo,” comenta con nostalgia.
Para ambas, Frances y para mí, como puertorriqueñas al fin, las fiestas empiezan desde Thanksgiving y hasta el después del 6 de enero y siempre celebramos el Día de Los Reyes. “Desde que nació mi hijo hace 11 años atrás celebro el Día de los Reyes Magos. Desde pequeño y con el frío pelú salíamos a cortar “pasto” (grama) para los camellos en la víspera de reyes.
Los Reyes es una tradición que yo también compartía con mis hijos. Una tradición navideña que forma parte de la cultura y la herencia de nuestras familias. Y que debemos de inculcar no importa dónde vivimos.
La sicóloga Puertorriqueña, Lydiana García, la cuál también vive en Los Angeles, sabe lo que es pasar la navidad lejos de su familia.
“Esa primera época navideña parecía ser muy triste, porque no conocíamos a nadie. Mi tía nos presentó, de manera virtual, con un compañero de trabajo oriundo de Los Angeles, y él nos invitó a la cena de Acción de Gracias en la casa de sus papás. Todavía recuerdo que llegamos a la casa, y ahí fue que lo conocimos en persona. Ellos nos abrieron las puertas de su hogar y nos acogieron como familia. Gracias a ellos, no pasamos las primeras navidades solitos.”
García está de acuerdo que sentimos mucha nostalgia al estar lejos de los nuestros, de nuestra música, tradiciones, la familia, la comida! “Durante épocas navideñas, uno puede sentir muchas emociones y recuerdos dependiendo de la experiencia que hemos sentido en el pasado. Hay personas que sienten tristeza por pérdida de familiares o al haber tenido traumas durante esta época,” dice la doctora.
De echo, es normal que diferentes emociones se despierten durante esta época, sobre todo si somos inmigrantes o expatriados. En especial si estamos solos y sin familia.
Aquí 6 sugerencias para manejar estas emociones que pudieran interferir durante las fiestas con el diario vivir, incluyendo el trabajo, sueño, la alimentación, y sobretodo la vida familiar.
- No se quede solo. Busque grupo de apoyo, amistades, por ejemplo. Adopténse uno al otro y planeén reuniones juntos.
- Comparte sus tradiciones y crea nuevas tradiciones de navidad, sobretodo con sus niños; por ejemplo, hacer amigo secreto con amistades, planear una cena de noche buena, ir al cine el día de navidad, celebrar los reyes poniendo pastito (si tienen hijos), cocinar la comida típica de su país, ir a hacer labor voluntaria, entre otras.
- Crear un plan de manejo de emociones que incluya cosas que usualmente le hacen sentir bien. Por ejemplo, tener accesible fotos, videos o imágenes que le brinden una sonrisa o bienestar; sonidos que le hagan sentir bien (música), olores que le brinden un sentido de bienestar (velas, aceites esenciales, comidas, entre otras cosas.
- Mantenerse activo en los hobbies y actividades de ocio que le gusta: ejercicio, bordar, ver TV, ir al cine, cocinar, hacer manualidades, pintura/arte, entre otros.
- Recordarse que la época navideña tiene fin, y pronto volverá su vida normal.
- Buscar ayuda de ser necesario; líneas de emergencia y/o de apoyo, hablar con su doctor primario, buscar terapia psicológica, ayuda espiritual o religiosa, entre otras.
A todos les deseo unas lindas fiestas y una Feliz Navidad! En cualquier idioma, en cualquier cultura!
Bai, Bai,
Maritere
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